Hoy es miércoles por la tarde, el día en que mi grupo de fotografía se reúne. Pero, hoy no les acompañaré para poder ocuparme de otros menesteres como el que ahora mismo me ocupa. Andaba yo pensando en que hoy iniciaba mi andadura con Blogger cuando descubro (mi memoria hace que mi vida este llena de sorpresas, descubrimientos y redisfrutes de un montón de lugares, situaciones y experiencias) que TENGO UN BLOG Y HAY UNA ENTRADA DE 2009!!!
¿Cómo me gustaría saber en qué andaba yo metida el 20 de noviembre del mencionado año? Creo que dedicaré algún tiempo a bucear en mi disco duro.
Pero, además, en esa entrada menciono el, entonces, último viaje que había realizado. Curiosamente, me había planteado que esta entrada, que ahora escribo, versase sobre lo mismo dado que he vuelto de vacaciones hace cuatro días. Esto no hace más que ratificar lo maravilloso que es VIAJAR!
Sólo que esta vez cambiamos Suecia por Islandia. Sí, si, Islandia en febrero... Y, ¿Qué buscábamos? Pues paisajes blancos, cuevas de hielo, focas, frailecillos, cascadas heladas, y auroras boreales. No tuvimos mucha suerte, la verdad, ha coincidido un invierno muy caluroso y había poca nieve, las cuevas no se podían visitar porque estaban muy poco heladas y aurora no quiso aparecer. Pero, aun así es un país magnífico que te enriquece el alma y la vista. Aquí os dejo un collage realizado desde el teléfono móvil, al igual que las fotos que lo componen y que representa un resumen del viaje.
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